Analizamos la situación de la alcaldía de Quito con el abogado David Egas Yerovi, experto en derecho constitucional. "Se agotaron todas las instancias que le asistían a Yunda, se posesionó Guarderas, quien se mantendrá en el cargo hasta que acabe el período, en mayo 2023", informó que los cambios, tras la posesión de Santiago Guarderas, son inevitables.
"Yunda podría incurrir en infracciones, pueden usar la fuerza pública para que la asunción del cargo sea consumada" explicó. Indicó que, a Yunda, le queda el recurso extraordinario de protección, “puede armar un caso en derecho internacional, pero esto puede tomar varios años".
"Pasamos vergüenza, lo que Quito ha enfrentado nunca sucedió, ni en las peores administraciones” cuestiona. “Como alcalde, perdió legitimidad y respaldo, debió renunciar hace tiempo”, señala. No obstante, el abogado dice que, de encontrarse irregularidades en este caso, deberán ser sancionadas con todo el peso de la ley y así evitar dudas sobre una posible persecución o falta de pulcritud en el proceso.
En cuanto al hijo de Jorge Yunda, a criterio de Egas, “pudo existir tráfico de influencias por gestionar contratos dentro de la administración municipal, si hubo perjuicio al Estado estaríamos hablando de peculado, si hubo coimas se trataría de un caso de cohecho o delincuencia organizada, son temas que se deberán investigar”.
En otro ámbito, sobre el sistema legal de Ecuador, considera que deben existir cambios para que funcionarios no se queden en el cargo de manera ilegítima, y reformas a las leyes para que esté claro cuándo un funcionario puede perder el cargo o puede subrogar, ser beneficiario de licencias; solo así se podrá dar una solución a estos problemas.
Finalmente dijo que espera que la nueva gestión mejore la administración y solucione problemas como los del Metro de Quito, el concurso de rutas y frecuencias de buses, electricidad, vialidad, recolección de desechos, "no podemos tener una nueva cacería de brujas para otra remoción" fueron sus palabras.