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Cuenca festeja sus doscientos años de independencia, el Bicentenario, y lo celebra con un total abandono por parte del Estado, comentó el economista Enrique Serrano, exdirector del CREA.
“Nos contentamos con halagos de que Cuenca es la Atenas del Ecuador, de que es una ciudad bella, pero no hay una verdadera ni oportuna atención del Estado” manifiesta el analista y miembro del Foro Autónomo por el Bicentenario, contrario a ello, dice el economista, “hace inversiones absurdas con actos de corrupción de por medio, como el Tranvía y el Poliducto Cuenca, o la imposición de la actividad minera”, compara la situación de Cuenca y el Azuaya con Guayaquil, con proyectos y programas en marcha.
Comentó sobre el nuevo acceso sur a Cuenca, “es la típica obra que se anuncia con bombos y platillos y no hay una correcta socialización” manifestó y cuestionó los cobros por el mantenimiento de la Cumbe-Biblián que deberán pagar los ciudadanos. Comparó la obra del nuevo acceso sur a Cuenca con el Tranvía, una obra que a su criterio podría demorar años en construirse.
En el contexto vial que enfrenta la provincia, exige, a propósito de la celebración del Bicentenario, la presencia del ministro de Transporte y Obras Públicas, Gabriel Martínez. “Cuando se trata del Azuay o Cañar, las autoridades no tienen tiempo, ahora por el Bicentenario deberían recorrer la provincia” solicitó Serrano.
Otro problema que se suma al vial es la explotación minera y sus consecuencias en la infraestructura; se refirió a la caída de un puente vehicular en Yantzaza, provincia de Zamora Chinchipe mientras pasaba una volqueta que sacaba material de la empresa minera Lundin Gold, situación que para Serrano puede repetirse en Cuenca donde la infraestructura vial de por sí enfrenta serios daños.
Finalmente dijo que a los cuencanos les tratan como “imberbes”, autoridades que “alaban” a Cuenca calificándola como la ciudad más bonita, y por otro lado quieren dañar sus ríos con la actividad minera.