Expertos en epidemiología aseguran que la expansión de la COVID-19 debido a la circulación de nuevas variantes, a la poca capacidad hospitalaria y el reducido número de pruebas, es preocupante.
Andrea Gómez, médica, alerta que no hay camas de cuidados intensivos, lo que incide directamente en los índices de mortalidad. “No hay capacidad humana ni técnica para atender a tanta gente" indicó.
Cuestionó que en Ecuador se realicen pocos test, únicamente para comprobar el contagio de personas que llegan a las casas de salud con sintomatología relacionada a COVID-19. “No cumplimos las recomendaciones internacionales, un mayor número de test servirá para determinar de manera temprana los contagios, personas asintomáticas; al Gobierno le beneficiaría para tomar mejores decisiones” señala.
Gómez enfatizó que en otras ciudades no se pueden hacer estudios para identificar qué variantes circulan, recomienda disminuir la movilidad para mermar los casos.
Insiste en que no hay organización en la ejecución del Plan de Vacunación, “vemos aglomeraciones, no terminamos de vacunar a los médicos y estamos con los adultos mayores” cuestionó.
Considera que es preferible un confinamiento general y no focalizado, sabe que hay personas que no pueden confinarse pero es el último recurso para poder bajar la ocupación hospitalaria.
"Ecuador hace tres testeos cuando lo recomendable es 10; en otros países cuando la capacidad sobrepasa el 85% se confinan" explicó la experta.
Lamenta que “el personal no de más, que los contagios sigan en aumento, mientras la gente perdió la sensación de riesgo. Nadie nos dice dónde están los focos de contagio" reprochó.
Exhorta al Gobierno a mejorar la comunicación para que población entienda los riesgos y se quede en casa. Incitó a reforzar el sistema de salud para vacunar de manera masiva. "Necesitamos inversión y política pública" dijo Andrea Gómez.
Sobre las variantes explicó que mientras más se transmite el virus más tiende a cambiar.
Gómez señala que Ecuador tiene los peores indicadores en Latinoamérica. "Estamos entre los primeros lugares en mortalidad después de Perú, no mejoramos el testeo, el Gobierno no sabe del exceso de muertes, son más de 50 mil personas que han muerto probablemente por la pandemia; es necesario que se transparenten las cifras” reclamó.