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Pablo Piedra, experto en temas mineros, criticó el modelo de “extractivismo extremista” impulsado por distintos gobiernos en Ecuador, que —según indicó— se impone por encima de criterios técnicos, jurídicos y sociales. Como ejemplo, citó el avance del proyecto minero Loma Larga, a pesar de las sentencias judiciales y consultas populares que lo cuestionan.

Piedra advirtió que no se están respetando los mecanismos de participación ciudadana establecidos en la Constitución, especialmente el derecho de las comunidades a decidir sobre la concesión de sus territorios a actividades extractivas. “No se consulta previamente, como exige la normativa, y eso pone en riesgo no solo la legalidad del proyecto en Kimsakocha, sino también la inversión misma”, señaló.

Criticó que las instituciones públicas, en lugar de hacer cumplir la ley, se alineen con los intereses del extractivismo. “Los ministerios se ponen al servicio del modelo extractivo, sin importar el marco jurídico vigente”, denunció.

Piedra también lamentó la militarización de zonas rurales y los procesos de expropiación que afectan a pueblos y comunidades indígenas. “Primero dibujan las concesiones y luego consultan. Las comunidades deben ser consultadas previamente, no después de tomar decisiones”, enfatizó. Además, advirtió que esta imposición de fuerza podría desembocar en conflictos y procesos judiciales contra el Estado.

Finalmente, hizo un llamado a la ciudadanía a unirse en defensa de los páramos y los ecosistemas estratégicos amenazados por la minería a gran escala.