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El doctor Paúl Cárdenas, master en Ciencias en Medicina Molecular, catedrático de la Universidad San Francisco de Quito, se refirió a la situación actual de la pandemia en Ecuador, los estudios realizados en torno a las nuevas variantes del virus y su incidencia en el país. Informó que tras un año de la pandemia se han realizado diversos estudios epidemiológicos y confirmó que en la provincia del Azuay, en la ciudad de Cuenca, no se ha detectado la presencia de las nuevas variantes encontradas en Reino Unido y Brasil pese a que en otras ciudades como Quito y Guayaquil ya existe un contagio comunitario.

Explicó que el incremento de casos positivos de Covid 19 en el país no responde a la presencia de las nuevas cepas del virus sino más bien al relajamiento de la población, insistió en la necesidad de continuar con el uso de la mascarilla, el lavado de manos y el distanciamiento físico.

Explicó la importancia de la vacuna, pero aclaró que la inoculación aunque es una herramienta necesaria para combatir la pandemia requiere de otras medidas que permitan sostener un proceso eficaz. Puso como ejemplo Chile que, si bien ha vacunado a un importante porcentaje de su población hay un repunte de casos que le ha llevado al país a tomar nuevas medidas de restricción.

La vacuna protege hasta en un 90% para que la enfermedad no se desarrolle de manera grave, esto luego de unos 14 días de aplicada la segunda dosis; esto no quiere decir que la persona vacunada no pueda ser un factor de transmisión o contagio por lo que es necesario seguir manteniendo el uso de la mascarilla y el distanciamiento. Para Cárdenas tampoco se debería descuidar el testeo de casos. “Mientras no se vacune el 70% de la población, la transmisión del virus no va a lograr controlarse” comentó.

“Espero que la vacuna termine la pandemia, espero la inmunidad de rebaño, tengo la esperanza de que el otro año regresemos a la vida como la teníamos antes” dijo finalmente.