Sobre las denuncias de injerencia del narcotráfico en las fuerzas del orden de Ecuador, dialogamos con el politólogo Santiago Basabe. “Es lo que ha pasado siempre, lo llamativo no es la noticia, se encienden las alarmas cuando estas vienen del Embajador de Estados Unidos”, comenta. En este contexto recordó las denuncias de Arturo Torres sobre los vínculos entre el narcotráfico y las fuerzas del orden y nada se ha hecho, dijo que también se habló de narcogenerales y tampoco se investigó.
“Ojalá se inicie un proceso para intentar hallar una salida”, no es solo sacar a generales implicados, advierte Basabe; pues, para el experto hay un problema de infiltración muy serio en las fuerzas armas y en la policía.
La credibilidad en la policía y fuerzas armas ha descendido, “es un efecto perverso en las declaraciones del embajador norteamericano, algún interés debe haber, hay mucha tensión por la visa retirada a generales activos”, manifiesta. Cuando se generaliza, causa daño a personas honestas que trabajan en la institución, advierte.
Para Basabe hay una relación cercana entre lo que ocurre en las cárceles y el narcotráfico y la falta de seguridad”, considera que estos problemas vienen de años atrás provocados por el desorden institucional de al menos una década. “El crecimiento de Manta y otras ciudades está relacionado con el narcotráfico, viven en función de lavado de dinero del narco, hay hoteles lujosos, restaurantes para lavar el dinero” y añadió a esto el conocimiento que tienen de aquello los organismos de inteligencia.
“Hay jueces y fiscales y un grupo de abogados que son defensores del narcotráfico, se conoce quienes son, así como los actores políticos, es imposible ocultarlos”, denuncia.
Según el analista, la debilidad del Gobierno fue que no difundió el éxito del plan de vacunación, además califica de difíciles las relaciones entre la Asamblea y el Ejecutivo, “pactaron para poder tener mayoría”, el 2022 será complicado, opina.
Sugiere que el Gobierno mejore en la toma de decisiones, “todo demora meses, se requiere agilidad para atender las demandas sociales como la situación de las cárceles, la compra de medicamentos”, indicó.
También opina que algunas declaraciones de Lasso han sido precipitadas, “calificar a Leonidas Iza de anarquista era innecesario”.