Para el economista Oswaldo Erazo, secretario ejecutivo de la CAMDDEPE, el mercado de combustibles es dinámico a nivel nacional. “Hay precios altos, hay que tener en cuenta el aumento en el precio de petróleo. La gasolina simple tiene un costo mayor que el diésel, el crudo Brent que generalmente está sobre el precio del WTI ahora están igual. Hay cosas inusuales a nivel internacional y afectan al país”, comenta.
“Somos un país petrolero, pero no productores de combustibles como deberíamos. El 70% de combustibles que usamos es importado, el 84% del gas que consumimos es importado”, indicó.
Sobre la derogatoria de Decreto 95 dice que nunca se ejecutó por lo que no tiene ningún efecto en la economía. Sugiere reducir los subsidios.
Sobre la explotación petrolera dice que no se han incrementado las reservas, “en siete o nueve años ya no tendremos para producir”.
Considera que en el país hay una oportunidad para la focalización de los subsidios. Recalca que su aplicación no ha ayudado a redistribuir la riqueza, por lo que advierte que deben aplicarse de manera focalizada y de forma temporal. Insiste en que no se beneficia a los que menos tienen, sino más bien a quienes más tienen. “Son más de 300 millones en subsidios al año, son cifras enormes, con eso se puede hacer obras”, manifiesta.
Recomienda focalizar el subsidio mediante tarjeta. “Se podría entregar al beneficiario el monto asignado, pero primero se debe identificar al usuario, y definir el tiempo y el valor del subsidio que le correspondería”, explica.
Reconoce que hay dudas sobre la tabla y los valores de los subsidios, esto en el marco de los pronunciamientos de los trabajadores del sector petrolero, dice que Petroecuador deberá transparentar las cifras.
Otro tema que preocupa es la calidad de los combustibles y la entrega de las nuevas gasolinas con un octanaje superior. “Tenemos dudas sobre la calidad, en 10 años no subieron el octanaje, y ahora anuncian que en pocos meses sacarán al mercado los nuevos productos”, manifiesta.
“Incrementan el etanol para bajar costos, la calidad no es solo octanaje sino cantidad de azufre. Por el momento el consumidor prefiere precio a calidad. Además las gasolineras no pueden ampliar infraestructura, no se ha incrementado a su favor el margen de comercialización”, indica.