Dr. Daniel Orellana
Docente universitario
Investigadores de la Universidad de Cuenca han venido analizando la situación de la movilidad en el cantón desde hace unos cinco años; uno de los actores, Daniel Orellana, indicó que Cuenca es una ciudad con condiciones favorables para la implementación de un sistema de movilidad justo e inclusivo, sobre todo por su condición de ser una ciudad intermedia.
Orellana aportó con algunos datos que deberían ponernos sobre alerta. El número de vehículos crece cuatro veces más rápido que el número de personas; es insostenible para la ciudad por las consecuencias que esto acarreará como embotellamientos, ruido, accidentes, daño al medio ambiente.
En Cuenca, el 36% de los hogares usa el vehículo particular para movilizarse, el resto, medios como transporte público en su gran mayoría, también hay un porcentaje que usa bicicleta o prefiere caminar; sin embargo, la ciudad lleva años sin implementar infraestructuras que promuevan una movilidad sostenible. “Es una deuda que se arrastra desde hace años, se hacen esfuerzos modestos, esto se debe corregir, más adelante será más costoso en términos de condiciones de vida y económicos” explicó Orellana.
Las investigaciones muestran que la infraestructura existente favorece al vehículo privado, mientras que las personas que usan el transporte público, otro medio alternativo o caminan, enfrentan una serie de obstáculos físico, sociales, de seguridad. De cualquier manera, los resultados de las investigaciones afirman que los usuarios del transporte público, si bien no lo califican como bueno, tampoco lo ven mal, más bien quienes nunca usan el bus son quienes exponen percepciones negativas calificándolo como inseguro, expresan temor a ser víctimas de algún atraco, por ejemplo, pero no lo hacen desde la experiencia, señala Orellana. “Tenemos una ciudad injusta, las personas tienen dificultades para caminar mientras se prioriza la transportación en vehículos” critica el Investigador.
Dijo también que la distribución de las líneas de buses no responde a los requerimientos ciudadanos de movilidad, cuestionó, por ejemplo que haya ocho líneas que pasen por un mismo lugar mientras otros sectores están desatendidos.
Finalmente ratifica que Cuenca tiene suficiente espacio para una buena movilidad, las calles están subutilizadas y mal diseñadas, las condiciones actuales nos dicen que si se toman las decisiones correctas, estamos a tiempo de mejorar. “Estamos cerca del colapso, debemos pensar seriamente en las obras que se proponen para la ciudad y las medidas que se adopten para el uso de las vías y los espacios públicos” comentó.